Y...?

Como una canción en este mundo,
una poesía en el infierno o
un adios en el paraíso.

Son los dias que discurre por los pasajes muertos de mis ganas,
Es la vida rezándome un salve,
Son las lagrimas pidiendome un basta,
Son los arboles de este bosque
tendiéndome sus hojas para aliviar el dolor de mis caidas.

Y eso no basta.

Las notas duramente golpean mi sien,
La poesía demasiado cruda cae a mi alma,
El adios muy tarde sigzagueando llega a mis pies.

Y mi alma no se contenta con un salve,
Y mis lagrimas se aleja del basta,
Y los árboles, muertos han caido a sostener mi cuerpo,
Y
¿todos los demás que existierón?,

Están a un paso de mí,
Están a un paso de mi vida,
Están a un paso bebiendo un trago y
discutiendo mis poesías con mis amigos, los blasfemos,
en el infierno;
empuñando un tabaco,
abrigandose en el humo gris,
Susurrandome al oido, basta.

YA ESTÁ

¿Que voy hacer ahora que mis ganas han muerto?,
¿Que voy hacer mañana que mis sueños estan extintos?

Ya nada, la nada parece pronunciarse mas que el todo;
El vacio parece ser mas consistente que este mar de adioses.

Lagrimas negras brotan de este infierno, en que se ha convertido mi mundo,
Lagrimas rojas emanan de este tetrico espacio que nada tiene.

as ideas de este mundo ruedan sin sesar por la sien del hombre que mi muere,
El tiempo que encierro para este adios,

Nada, ni siquiera las migajas del mal decir.
A dios a todo y a todos,

Porque no espero mañana recordar los dia que hoy dejo pasar,
Porque no quiero mañana lorrar al tiempo que dejo detrás mio.

Hay de ustedes mis amigos que nunca estan y siempre gritan,
A ustedes les espera el eterno lamento de vivir con mi sombra,
Sombra que hoy lamentan sin frenos.

En fin, l